Recuerdo el segundo día del Master de Comunicación Política e Institucional. Los algo más de veinte alumnos nos habíamos presentado ya: algunos trabajaban en organismos gubernamentales, grandes corporaciones y empresas, consultoras de comunicación y agencias de publicidad;  otros lo hacíamos en instituciones y pequeñas empresas… o estaban en el paro.

Un comienzo sorprendente

Sábado por la mañana: el subdirector adjunto de un periódico nacional, en su sesión sobre “Relación de los Gabinetes de prensa con los periodistas” comenzó a señalar los errores habituales, pero con un tono indisimulado de desprecio hacia los gabinetes. 

Algo debió notar en el ambiente, cuando se paró y dijo: “Perdonad que haya sido tan negativo, pero es lo que he vivido en muchos años de profesión.  Para que veáis que no todo es negativo, ¿sabéis quiénes han hecho un gran trabajo desde dos departamentos de comunicación?”. Silencio en la sala. “¿Alguien conoce a Luis G.?” Y levanté la mano…, porque había trabajado con él un tiempo hasta su jubilación.

Se sorprendió pero siguió hablando: “Luis G. no forzaba para que le publicáramos noticias, ni amenazaba cuando le decía que iba a publicar una noticia contra su institución. Escuchaba, argumentaba y respetaba nuestro trabajo. Ha sido el único que iba a visitar a los periodistas cuando estaban enfermos en el hospital, o se preocupaba de llamar a alguno que había sido despedido del periódico, y era un profesional que entendía el trabajo de los periodistas (…)”. También elogió a la asesora de prensa de la Embajada de EE.UU.

Se comprenderá el asombro de mis compañeros y el sano orgullo que me llenó. Y es que, aunque la nota de prensa sea una herramienta básica de los Gabinetes, el punto central –como dice Carlos Molina en un post reciente– es el trato personal con los periodistas (bloggers, etc.).

Fundamentos de la relación entre gabinetes de prensa y periodistas

¿En qué puntos se debe cimentar esa relación Gabinete de prensa con el periodista? Se podrían decir muchas cosas, pero sólo apunto unas, para que si quieres las completemos con vuestras sugerencias.

Por parte del Gabinete de prensa o Departamento de comunicación:

  1. Reconocimiento y respeto de la independencia del periodista.
  2. Contestar habitualmente al teléfono o al correo electrónico.
  3. No esconderse nunca, aun cuando la noticia vaya a afectar a la empresa o institución.
  4. No trabajar a corto plazo, sino buscar que el periodista comprenda mejor, paulatinamente, los fundamentos y actividades de tu empresa o institución.
  5. Ante una información negativa no enfrentarse nunca, pero sí manifestar la legítima opinión del departamento de comunicación.
  6. No engañar, ni manipular, no pretender colar noticias, ni dificultar que contacte con otras fuentes informativas.
  7. Nunca puentear a un redactor.
  8. Pedir disculpas si ha habido un error en el envío de información, o cualquier otro elemento de la relación.
  9. Enviar el material en formato profesional, sin errores técnicos ni periodísticos.
  10. El periodista no es un medio para tu éxito, es una persona…

Por parte del periodista hacia el gabinete de prensa/departamento de comunicación

  1. No sucumbir a la presión de la fama –o del redactor jefe- para publicar una información, sin haber contrastado la información con el Gabinete.
  2. No ocultar información ni inventar “fuentes solventes”, para presionar al Gabinete y así sonsacar datos o declaraciones.
  3. No utilizar el off the record, ni elementos de conversaciones informales que no están relacionadas con la pieza informativa.
  4. Asumir la responsabilidad ante un error, una injerencia en su propio medio de comunicación.
  5. No puentear al Departamento de comunicación para llegar a personas de la empresa.