No soy profeta ni hijo de profeta, así que no sé si España ganará la Eurocopa. Pero lo que sí tengo claro es que Vicente del Bosque es el entrenador ideal para esta selección.

Durante estos días he leído algunas declaraciones suyas que me hacen pensar que, tras la Eurocopa, Del Bosque podría pasearse por algunas consultoras o departamentos de comunicación, para exponer las tres recetas del buen dircom. ¿Creéis que es broma?
Del Bosque durante el entrenamiento de España. (Juan Medina / Reuters) 
1. Estrategia, estrategia, estrategia
Todo español lleva un entrenador de fútbol dentro. Y proponemos cambios ante cualquier circunstancia. “Hay que poner un 9”, “Menos tocar y más llegar a portería”, etc. ¿Qué dice Vicente del Bosque?: Todos aquellos que dudan es que no tienen criterios firmes, “No podemos dudar de lo que estamos haciendo” afirmó el seleccionador en referencia a las especulaciones que han girado en torno al esquema bajo el que debe jugar España.

Esta es la diferencia entre la táctica y la estrategia, entre el corto y el medio plazo, entre ver el conjunto o dejar que una acción aislada protagonice el análisis: “La sensación que ha dejado a todo el mundo el remate de Rakitic no significa que sufriéramos tanto.

Del Bosque conoce a sus jugadores, estudia a los contrarios y tiene comprobado que el esquema funciona, al margen de contingencias o circunstancias, que no deben cambiar el rumbo porque entonces se traicionaría el estilo de los jugadores y a largo plazo mermaría su eficacia.
2. Análisis del entorno y de la situación
Del Bosque, además, sabe enmarcar su trabajo dentro de la situación general en la que debe desarrollar su trabajo: No es lo mismo jugar una Liga que un campeonato corto, donde no te puedes permitir un error y debes ser más precavido.

Y es que un error en el diagnóstico invalida toda la comunicación posterior. Para eso es necesario no dejarse guiar por impresiones, sensaciones o el ruido. Es necesario evaluar con datos. Después del partido contra Croacia, Del Bosque decía: Tuvimos un ‘setentaitantos’ por ciento de posesión, tiramos a puerta 16 ó 17 veces, ellos 7 u 8, dominamos más que Croacia y no jugamos mal. No estuvimos tan mal como me pareció en el campo, añadió.
3. Escuchar con humildad
En una entrevista en El Mundo le preguntan por qué no se aísla de los comentarios y las críticas: “Porque creo que es conveniente oír. Saber escuchar es una virtud más que un defecto. No rechazo ninguna opinión. Al contrario, asimilo y si veo que no es buena, no tengo la soberbia para decir que no lo es y que no tiene ni idea”.
Esa apertura le hace ganar en autoridad y ser capaz de liderar un equipo y un movimiento que le transciende: Había visto como todas las selecciones que se clasificaron terminaron sus partidos abrazándose y nosotros no, nos fuimos al vestuario como si no tuviera mayor importancia. Hemos pasado de pobres a ricos rápidamente y no sabemos valorar lo que tenemos, sentenció.
Su carácter afable, humilde y abierto –sin peloteos de ningún tipo, contagia a los jugadores optimismo, ganas de dar lo mejor que tienen porque ven en él a un líder. Declaró Iniesta después del partido contra Italia: Diría a la gente que estuviera tranquila y que confíe en el equipo, independientemente de quienes juguemos.

Conclusión
Estudiar la propia compañía, la competencia y el entorno para proponer una estrategia, y llevarla a cabo en constante escucha dentro y fuera de la empresa, con la actitud de aprender y modificar lo que sea necesario, por el bien de la compañía.
Tampoco pasa nada si me voy porque vendrá otro seleccionador que no va a desandar el camino que se ha andado. Igual que yo no he borrado nada del pasado. Los que vengan se apoyarán en todo lo que hemos hecho los anteriores”.
Vicente del Bosque, un gran tipo 😉